¿Quién es el macho alfa en el reino animal? – Juan contra Luis

El primero acto de Don Juan Tenorio incluye una competición entre hombres que está presente por culturas y especies: ¿quien es el macho alfa?  Nuestros dos hombres importantes en este juego son don Juan Tenorio y don Luis Mejía; ambos hombres fuertes, jóvenes y engreído especialmente en respeto a su destreza con las mujeres.  Primero, empieza con sus amigos Centellas (amigo de don Juan) y Avellaneda (amigo de don Luis).  Los hombres hablan los dos hombres y debaten quien es el mejor, cada hombre defendiendo su propio amigo.  Cuando Centellas dice, “no hubo hombre alguno que aventajarle pudiera con sólo su intención” (p. 15, líneas 290-292) Avellaneda responde que su amigo es más masculino que don Juan.

Después, cuando los hombres se quitan sus mascaras, don Juan y don Luis empieza lo mismo debate – quien es lo más “masculino”.  Cada hombre recita su propio discurso que se enfoca en su destreza.  Mientras don Luis dice “no habría nadie que hiciera lo que hiciera Luis Mejía” (p. 20, líneas 425-426), don Juan responde su mismo, “yo ‘gallardo y calavera” (p. 21, línea 468) y sobres sus “empresas amorosas”.  Los hombres están comparando sus “conquistas” durante su apuesta; quien fue lo mejor soltero.  Don Juan lo continua con su nueva apuesta, menos emoción y más competición cuando explica que solamente necesita seis días, “uno para enamorarlas, otro para conseguirlas, otra para abandonarlas, dos para sustituirlas, y una hora para olvidarlas” (p. 27, líneas 686-690).

Es un argumento clásico entre hombres jóvenes y por la mayoría de reino animal.  Los hombres luchan para decidir quien es el macho alfa, quien es más poderoso y masculino, quien es el campeón.  En términos generales, quien gana la mujer y la posición de poder.  Podemos mirar el mismo tipo de argumento en partidos de deportes, debates de los políticos, y aún en luchas para las mujeres en otros animales.  Este tema del machismo es popular no solamente en el arte en esta época, pero también en la vida normal de ahora.  Aquí es una competición y nada más; no les importa a quien les duelan, solamente quien puede hacer más que el otro.  Como dos carneros en una lucha para la única mujer, uno de los hombres va a sufrir.