Author Archives: Cordelia Stewart '19

El alivio de humor: cómo la función de Catalinón en la jornada II es similar a la función del humor en programas como How I Met Your Mother hoy en día

Barney Stinson en el programa de televisión de comedia que se llama How I Met Your Mother, similar a Joey en otro programa de televisión de comedia, Friends, es un mujeriego clásico con muchas “conquistas” de varias mujeres. Los amigos de Barney se burlan por sus acciones y disfrazan la inmoralidad de sus formas engañosas con el humor. De manera similar, Catalinón, como el amigo y criado de Don Juan, funciona como un alivio cómico cuando él reconoce y expresa verbalmente las acciones mentirosas de Don Juan.

Dos ejemplos de su comicidad:

  1. “No lo apruebo.

Tú pretendes que escapemos

una vez, señor, burlados,

que el que vive de burlar,

burlado habrá de [quedar]

pagando tantos pecados

de una vez.” (líneas 1435, página 195)

Aquí, Catalinón comenta en el “engaño nuevo” que Don Juan revela inmediatamente después de que él encuentra la letra de Doña Ana. Mientras de que esto es una advertencia sobre las repercusiones de las acciones engañosas en el caso de Don Juan, todavía hay cierta comicidad en el lenguaje detrás de la moralidad del contenido de sus palabras. El uso de la palabra “burlar” en diferentes capacidades incorpora el título de El burlador de Sevilla, y se convierte en una forma de trabalenguas (tongue twister en inglés). Catalinón ilustra la ironía de la situación de Don Juan cuando dices que él ha sido un burlador, pero que con tantos pecados es imposible escapar las repercusiones de sus engaños y eventualmente, va a afrontar las acciones con una propia burla. La inevitabilidad de la caída de Don Juan es evidente para la audiencia, Catalinón y básicamente todo el mundo con la excepción de Don Juan él mismo. Catalinón dice: “No lo apruebo”, como un amigo preocupado, no solo desde el punto de vista del criado, y es la única persona que sabe todo sobre sus acciones mentirosas. Por eso, es aún más humorístico para la audiencia ver la falta de racionalidad de Don Juan mientras él no escucha a Catalinón.

2. “Y tú, señor, eres

langosta de las mujeres

y con público pregón,

porque de ti se guardara,

cuando a noticia viniera

de la que doncella fuera,

fuera bien se pregonara:

<<Guárdense todos de un hombre

que a las mujeres engaña,

y es el burlador de España>>”

(l. 1480 de la versión en línea de la Biblioteca Virtual, página 199 y líneas cerca de 1565 en la edición de Alfredo Rodríguez López-Vázquez)

La metáfora humorística entre Don Juan y “la langosta de las mujeres” que declara sus engaños públicamente burla de las acciones absurdas de Don Juan. Antes de este comentario, Catalinón expresa su simpatía para “la pobre pescadora” (l. 1547 en el libro) o Tisbea, y “Ruego al cielo que salgamos de ella en paz” (l. 1558 en el libro), hablando de Doña Ana y el próximo engaño. Estas observaciones, algunas de los cuales están vocalizados directamente con la audiencia, “rompiendo el cuarto pared”, funciona como un control de la realidad de Don Juan y el reconocimiento explícito de las mentiras de Don Juan relaja la atmósfera.

Resumen breve y los personajes de la jornada I

Isabela está en el palacio con un hombre que ella piensa que es el duque Octavio, pero en realidad es Don Juan. Cuando se di cuenta de que no es su Octavio precioso, causa una escena y los soldados y el rey vienen a su habitación. Don Pedro es el Embajador de España y el tío de Don Juan; cuando oye que Don Juan fue con una mujer en el palacio, él acusa a Don Juan de ser mujeriego sin honor (100). Aunque Don Pedro fue encargada de castigar Don Juan, él produce una mentira para el rey sobre cómo él escapa a través de un balcón (131). Isabela confesa todo al rey y revela cómo Duque Octavio tiene su mano para el matrimonio. El rey decide castigarla con la prisión. Octavio dice a su criado, Ripio, con tono condescendiente, usando la palabra “necio” con frecuencia, que se ama a Isabela (280). Don Pedro conversa con Octavio. Octavio básicamente concluye la “gran traición de Isabela” (383), cuando escucha el cuento de ella con otro hombre en el Palacio.

La escena cambia un poco cuando hay un monólogo de Tisbea, una pescadora, sobre “la ventura sola” (446), la ridiculez de todas las chicas persiguiendo el amor (530) y cómo ella no necesita el amor de un hombre. Mientras de esto, Catalinón y Don Juan caen en el mar, casi se ahogan y Tisbea se enamora de Don Juan, repitiendo “¡Plega a Dios que no mintáis!” (691, 699, 723, 777). La conversación entre Tisbea y Don Juan involucra muchas referencias al fuego como una metáfora para el amor; por ejemplo, una vez Don Juan responde a Tisbea con “Mucho encendéis” (776) y Tisbea refiere a “tanto fuego en vos tenéis” (721). La próxima escena es una conversación entre el rey y Don Gonzalo, que habla mucho sobre Sevilla en su grandeza.  Don Gonzalo tiene una hija y el rey quiere planear un matrimonio entre ella y Don Juan. Al mismo tiempo, Don Juan confesa su amor por Tisbea pero Catalinón, como el “gracioso”, advierte que “Los que fingís y engañáis/las mujeres de esa suerte/lo pagaréis en la muerte” (992). La jornada termina con una repetición de la siguiente frase: “¡Fuego, zagales, fuego, fuego y rabia! ¡Amor, clemencia, que se abrasa el alma!” (1120 y 1135), por Tisbea, una sugerencia que ahora ella se siente más en tu alma sobre el amor que únicamente apatía.

Tirso de Molina (atribuido). El burlador de Sevilla. Madrid: Cátedra, 2012.