La Burla Publica de Gongora

Francisco de Quevedo escribió el poema “Poderoso caballero es don Dinero” como un comentario satírico sobre la sociedad, pero escribió “A una nariz” como una broma sobre su enemigo, Luis de Góngora. Quevedo conocido por ser antisemita, y como Góngora es judío converso, lo uso como una oportunidad para burlar de su nariz por un soneto entero, sin cambiar el tema. En la primera línea, dice que hay un hombre con una nariz “pegado”, lo que sugiere que la nariz es una carga para él. Los comparaciones de la nariz a unas cosas grandes son creativos y utiliza descripciones exóticas. Ejemplos incluyen “Ovidio Nason”, “una pirámide de egipto”, y “una galera”. Estos ejemplos se usan para enfatizar el tamaño de su nariz, pero también son interesantes y fascinantes, posiblemente para mantener la manera ligero de la broma. Además de los metafóricos, Quevado dice que la nariz es “un naricisimo infinito/muchisimo nariz” para asegurarse que no hay ambiguedad. A Quevado le odio “la estetica retorcida de Gongora” y posiblemente quería escribir un soneto sin duda a quien le escribio

Quevedo también quiere que decir que Gongora es inutil, porque se dice que es un “un reloj de sol mal encargado/ érase un elefante boca arriba”. Un reloj de sol sin el sol es inútil, y también la imagen de un elefante boca arriba es una idea absurda que ilustra cómo ve a Gongora absurdo o ridículo. En la línea final, dije que la nariz en la “cara de de Anás fuera un delito”, haciendo un comentario obviamente antisemita para recordarle al lector que los judíos crucificaron a Jesús.