Bécquer en la poesía de Jiménez

En la poesía de Jiménez, se ve la influencia de Bécquer en su escritura. En el poema “Anteprimavera,” escribe: “Mi barca parece/mi sueño, en un vago/mundo,” que parece mucho a la rima de Bécquer en que escribe, “En el mar de la duda en que bogo,/ni aún sé lo que creo/sin embargo, estas ansias me dicen/que yo llevo algo/divino aquí dentro”. Esta “inocencia becqueriana” de que trata la biografía de Jiménez en la lectura “Modernismo español” se ve en Jiménez, pero pienso que reinventa el romanticismo por sus papeles modernistas. Bécquer escribe “ni aún sé lo que creo,” mientras Jiménez describe su realidad como estar “en un vago mundo”. Es decir, toma Jiménez los temas de Becquér y los adopta para el movimiento del modernismo, que trata más de lo filosófico y cuestiona más la realidad.

Además, en su poema “Vino, primero, pura,” Jiménez escribe, “Y se quitó la túnica,/y apareció desnuda toda…/¡Oh pasión de mi vida, poesía/desnuda, mía para siempre!”. Cuando se compara con la Rima XXI de Bécquer (¿Qué es poesía?, dices mientras clavas/en mi pupila tu pupila azul./¿Qué es poesía? ¿Y tú me lo preguntas?/Poesía… eres tú), es aún más visceral, físico y sensacional que lo de Bécquer. Este ejemplo representa la diferencia entre el movimiento romanticismo y el movimiento modernista; Bécquer enfoca en los sentimientos, y Jiménez mueve de los sentimientos para hablar de la forma, del cuerpo y de las sensaciones vicerales. En estes poemas, Jiménez representa la parte del movimiento de la literatura modernista que enfocó en cambiar el estilo romanticismo por explorar la realidad.